Cáncer y salud bucodental ¿cuál es su relación?

Cerca del 20% de la población mundial sufrirá algún cáncer a lo largo de su vida. ¿Existe relación entre cáncer y salud bucodental? Descúbrelo. 

Todos los 4 de Febrero se celebra el Día Mundial contra el Cáncer, promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y no queríamos dejar pasar la oportunidad de hablar de la relación entre cáncer y salud bucodental. Porque existe, es muy importante, y a menudo está subestimada.

Así que si tú, un familiar o un amigo cercano, estáis pasando por esta enfermedad, o quizás no, pero te interesa conocer todos los datos al respecto, este artículo de nuestro blog está elaborado para ti.

Relación entre cáncer y salud bucodental

La relación entre el cáncer y la salud bucodental es compleja y estrecha. La boca suele ser una de las primeras áreas del cuerpo en ser afectadas por el cáncer y, a su vez, la salud bucal puede influir en el desarrollo y el tratamiento de la enfermedad.

Cuando hablamos de cáncer nos referimos al cáncer oral en sí mismo, o a cualquier otro tipo de cáncer.

En cuanto al cáncer oral, afecta los tejidos de la boca, incluyendo los labios, la lengua, las mejillas, el paladar y la garganta. Es una enfermedad grave que puede ser mortal si no se detecta y es tratada a tiempo. Los factores de riesgo incluyen el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, la exposición a productos químicos y el virus del papiloma humano (VPH).

Los síntomas más comunes que se experimentan son dolor en la boca, un bulto o una llaga que no desaparece, dificultad para tragar, cambios en el habla o en la apariencia de los dientes o las encías. Por otro lado, los tratamientos para el cáncer oral o cualquier otro tipo de cáncer, como la radioterapia y la quimioterapia, pueden afectar la salud bucodental de manera significativa y causar efectos secundarios en la boca. Los más comunes pueden incluir sequedad bucal, hinchazón y úlceras en la boca, lo que puede dificultar la masticación y la deglución de alimentos y nutrientes esenciales. Además de aumentar el riesgo de caries, infecciones y enfermedades periodontales, que provoquen la inflamación de las encías e incluso la pérdida de dientes.

Atención profesional especializada

Los pacientes oncológicos suelen tener el sistema inmunológico debilitado. Bien por la propia enfermedad, bien por los efectos secundarios de los tratamientos, o por una combinación de ambos. Por este motivo es necesario e imprescindible ponerse en manos de profesionales dentales y oncólogos.

La higiene oral regular, los exámenes periódicos y la prevención temprana son claves para prevenir y tratar cáncer y mantener una buena salud bucal. De ahí la necesidad de que los enfermos reciban una atención dental adecuada antes, durante y después de sus tratamientos. Esto incluye:

  • Una revisión dental completa antes del tratamiento, para identificar y tratar cualquier problema dental existente.
  • Una higiene bucal rigurosa durante el tratamiento, para prevenir infecciones y mantener la boca sana. También se pueden recomendar productos específicos para la higiene oral y para mantener la boca hidratada, como enjuagues bucales sin alcohol.
  • Tratamientos preventivos, como la aplicación de flúor y la realización de radiografías, para detectar cualquier problema dental en sus primeras etapas.
  • Tratamientos de rehabilitación dental después del tratamiento, para restaurar la función y la apariencia de la boca.

Medidas preventivas para los pacientes

Además, existen medidas preventivas que los pacientes oncológicos pueden aplicar en su día a día para ayudar a prevenir y minimizar los efectos secundarios en su boca durante y después de sus tratamientos. Estas medidas incluyen:

  • Mantener una higiene bucal rigurosa, incluyendo el cepillado regular de los dientes, el hilo dental, la utilización de enjuagues bucales sin alcohol, y un raspador o limpiador lingual para eliminar la acumulación de bacterias en la lengua.
  • Mantener una dieta equilibrada, rica en nutrientes, y evitar alimentos y bebidas ácidos y azucarados, que pueden aumentar el riesgo de caries dental.
  • Beber suficiente agua para mantener la boca húmeda y prevenir la sequedad bucal.
  • Usar productos específicos para la sequedad bucal, como geles y pastas, que pueden ayudar a lubricar la boca y reducir la sensibilidad dental.

Es frecuente que los pacientes oncológicos experimenten efectos secundarios en su boca a largo plazo, después de finalizados sus tratamientos. Boca seca, sensibilidad dental, pérdida de hueso y tejido dental o caries dental, son los más habituales.

Por eso, un seguimiento continuo y regular en el tiempo en consulta, nos permitirá monitorear su salud bucodental y tratar cualquier problema existente, o que pueda surgir, para mejorar su calidad de vida y su bienestar general.