¿Tienes una prótesis dental? si quieres mantenerla en buen estado, no te puedes perder nuestra guía básica sobre el cuidado de las prótesis dentales.
Al igual que es esencial limpiar los dientes naturales y el resto de la boca, el cuidado de las prótesis dentales es necesario para garantizar su durabilidad a lo largo del tiempo. Estableciendo una rutina diaria e interiorizando una serie de pasos a seguir, lograrlo será como coser y cantar. Esto es todo lo que debes saber.
Introducción al cuidado de las prótesis dentales
Las prótesis dentales son estructuras artificiales que se crean para reemplazar dientes perdidos en la boca. Son fundamentales para devolver las funciones completas de masticación, deglución, oclusión y, hasta el habla, a las personas a los que les faltan piezas dentales. Siendo necesarias también a nivel estético y psicológico para recuperar sonrisas y la seguridad y la confianza perdidas.
Pueden ser de dos clases, prótesis dentales fijas o prótesis dentales removibles (extraíbles), y, de ambas a su vez, existen alternativas, como ya abordamos en nuestro artículo sobre los tipos de prótesis dentales, que te recomendamos que leas.

Pero, mientras las prótesis dentales fijas pueden limpiarse como lo hacemos con nuestros dientes naturales (cepillado 2-3 veces al día, uso de hilo dental o cepillos interproximales y colutorio), las removibles si necesitan de más cuidados.
Mantenimiento y cuidado
1/ Lo primero a tener en cuenta es que la prótesis dental debe limpiarse a fondo al menos una vez al día. Si no es posible hacerlo tras cada comida, debe quitarse, aclararse bien con agua y enjuagar la boca.
2/ Las prótesis se deben limpiar con un cepillo especial para prótesis, usando un líquido específico o un poco de jabón, e incidiendo especialmente en las partes metálicas. Después de hacerlo, hay que aclararlas muy bien con agua. De esta manera, se eliminarán los restos de comida y se evitará la formación de sarro.

3/ Las personas que conservan piezas dentales naturales deben cepillarlas, a ser posible, sin la prótesis, o si no, utilizar un cepillo interdental.
4/ Para que las encías y los tejidos de la boca descansen, es recomendable quitar la prótesis en algún momento del día. El mejor quizás sea por la noche.
5/ Sigue al pie de la letra las indicaciones de tu dentista en cuanto a las revisiones. Sólo así podrás saber si tu prótesis se mantiene bien, sigue ajustándose de manera correcta en tu boca, y si todo está en orden.
En resumen, diariamente, es aconsejable cepillar la prótesis y quitarla por la noche. Y, regularmente, visitar al dentista para hacer las revisiones pertinentes y controlar que todo en la boca se encuentra perfectamente.
En Simón Blas tenemos profesionales para ayudar con la elección de la prótesis más adecuada a cada paciente. Tras un estudio previo de la anatomía de la boca, dientes y mandíbulas, mostramos una simulación dental para conocer cuál será el resultado final.
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